Manejando por el segundo piso, ¿Cuál sería mi sorpresa al ver un perro corriendo a máxima velocidad?, ¡y en sentido contrario!

Ahí no para la cosa... atrás venía una señora haciendo un esfuerzo sobrehumano por alcanzarlo y atrás de ella, la camioneta maniobrando en reversa desde donde seguramente brincó el perrito por la ventana.

¿Qué puede salir mal?

El perrito puede ser esa "idea loca" que se le ocurre al jefe en un momento dado.

No le pregunta a nadie y simplemente se echa a correr a máxima velocidad, pero en sentido contrario a lo que se venía avanzando previamente.

La señora puede ser el jefe que por más que corre, no alcanza su idea, las piernas no le dan y de reojo ve muchos le llevan la contra. Finalmente, la camioneta es el equipo u organización que intenta dar alcance al jefe, no está hecho para manejar en reversa, pero muchas veces no le da tiempo ni de dar su opinión al respecto.

La idea se le metió la idea al jefe y todos deben ir para allá.

Una locura ¿no?

En defensa del perrito, seguramente quería regresar a casa, a un lugar seguro y lo decidió en el peor momento.

En defensa del jefe, muchas veces quieren innovar, escuchan una moda que les parece disruptiva y deciden ir tras ella.

¿Sus errores?:

1. No escuchar al equipo, no preguntar, ¿qué opinan los clientes?, ¿qué está haciendo la competencia que les esté funcionando?

2. No establecer la creatividad como un proceso.

3. Esperar resultados inmediatos de cambios posibles.

4. Fijar métricas inadecuadas para el objetivo que se busca.

5. Buscar el "gran salto" en lugar de tener mejoras continuas.

6. Escuchar ideas que solo confirmen las propias.

7. Enojarse cuando alguien en la sala te lleva la contra.

8. Pensar que los éxitos pasados serán los éxitos del futuro.

9. Creer que tener personas que piensan diferente a ti es una amenaza.

En lugar de eso, el jefe puede tomar estas acciones:

Dar la oportunidad de que se expresen y pedir ideas al equipo.

No es la primera ola de sugerencias la que funciona, debemos excavar y preguntar varias veces más.

El equipo debe sentirse seguro de participar, de opinar sin que existan críticas o burlas. Eso es combustible para la motivación y la creatividad.

Permitir los errores es fundamental.

¿Cómo va a haber innovación si corres a alguien que intentó algo diferente?

Nadie aprendió a andar en bicicleta al primer intento.

La mayoría de las ideas de mejora son incrementales, de cualquier manera agregan valor para la empresa.

El techo anterior es tu nuevo piso, mantén la voluntad de seguir avanzando.

La próxima vez que se te ocurra una idea un poco loca, que creas que pueda funcionar, asegúrate de preguntar a tu equipo y revisar la forma de implantarla.

Se vale pensar diferente, pero haz la pregunta a tu equipo:

¿Qué puede salir mal si bajo la ventana, salto del carro y corro en sentido contrario en una vía rápida?

PD No sé qué pasó con el perrito, espero esté a salvo.